Pedir perdón (lo más difícil)

¿Cuántas veces pediste perdón?

Nunca fue fácil.

En principio no gusta, cuesta, a veces resulta imposible.

Puede ser instantáneo, postergado

o eterno.

Impensado o largamente meditado, estudiado, sondeado.

Espontáneo o ensayado.

Natural o actuado.

Correspondido o ignorado.

Una o muchas veces.

Los hubo que valieron vidas

incluso que valieron la vida.

Pero hay quien nunca pedirá perdón

bajo ningún concepto ni circunstancia.

A nadie ni por nada.

Un acto inconcebible,

indecente.

Hay quien piensa que pedir perdón es humillarse, arrodillarse, claudicar.

Cuando a veces es simplemente “vamos a llevarnos bien”

ahora y después de todo.

Puede ser “me equivoqué”

pero hay quien nunca se equivoca.

Puede ser “tenías razón”

pero hay quien nunca la da ni la presta.

Puede ser “no lo volveré hacer”

pero hay quien sin duda lo volvería hacer

y lo que realmente le atormenta, a estas alturas, es no poder.

Podría ser “volvamos a caminar juntos”

sin preguntarnos más si fui yo o fuiste tú

porque seguramente fuimos los dos.

Hay quien piensa que pedir perdón es de cobardes.

Pero la valentía no tiene nada que ver con la altanería, la fanfarronería, la soberbia.

Es más, lo valiente es pedir perdón.

Lo audaz es hablar, entenderse, comprenderse.

Lo valeroso y lo valioso.

Y qué grande es…

Claro, no está al alcance de cualquiera.

Sí, en este mundo, para algunos, es la palabra más difícil.

Y hay quien nunca, ya lo sabemos, pedirá perdón.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s