Se cumplen cinco meses del cierre de Google News en España. Y sin noticias de que pueda haber marcha atrás. Ni se vislumbra una posible vuelta a la normalidad, esto es, que los usuarios españoles puedan disponer de un servicio de enlaces a noticias de todos los medios de comunicación, como disponen los usuarios de todo el mundo.
Y eso que, en el momento de consumarse la barbaridad, a unos y otros les pareció entrar cierto vértigo, tal vez sonrojo. Los grandes editores de prensa, promotores a través de la AEDE de la legislación que motivó la drástica reacción de Google, dijeron al día siguiente que estaban abiertos a negociar lo que ellos mismos habían calificado de “irrenunciable”. Seguramente ya habían visto la drástica caída de sus propias cifras de tráfico, sólo 24 horas después de la suspensión del servicio. El ministro de Industria manifestó al respecto que “ninguna decisión debe ser tomada como irreversible”. Y directivos españoles de la empresa de Palo Alto se mostraban convencidos, hablando en privado, de que al final se llegaría a un acuerdo, como se llegó en Alemania, Bélgica y otros países.
Pero el caso es que está pasando el tiempo y nadie ha vuelto a mover ficha. Commscore y otras firmas de medición han seguido informado de la caída del tráfico de todos, de los pequeños y también de los grandes, que se suponían los únicos beneficiarios de la polémica legislación, y ya les avisaban los expertos de que tampoco. Así ha sido. Y los miles de usuarios de este servicio permanecemos huérfanos, saliendo a pescar las noticias en el buscador, como sardinas en el océano. Mientras, y aunque sostenga que económicamente no le afecte, no puede decirse que Google se sienta cómoda con esta situación. Pero con tantos frentes abiertos como tiene la compañía, tampoco van a estar permanentemente pendientes de hacer una llamada. Mantienen cerrado el chiringuito y que cada uno se las componga.
Como la vida sigue y los intereses comunes ponen de acuerdo a cualquiera –lo de que la política hace extraños compañeros de cama, que dijera aquel-, recientemente se ha anunciado una iniciativa entre la propia Google y los propios editores de prensa, dicen ellos que para apoyar el periodismo digital, dicen otros que soltándole dinero a la AEDE. No ha faltado entonces quien ha especulado con que ese proyecto conjunto podría significar un acercamiento de posturas respecto al controvertido servicio de noticias. Pero en seguida los portavoces del gigante de Internet han salido a descartar tal posibilidad. Hasta que no se cambie la ley, no van a dar marcha atrás. En cuanto a los legisladores, demasiadas prioridades tienen este año, de grandes citas electorales, como para detenerse en lo que ahora son minucias.
Y así siguen cayendo los meses, todos seguimos perdiendo, y seguirá sin haber noticias. Como si no pasara nada…
Byenrique 