No tendremos honra pero tenemos chaleco. Si eres periodista y quieres tomar fotos o vídeos de una manifestación sin que te aporreen, o simplemente estar ahí para enterarte de lo que va pasando y que no te carguen, ponte el chaleco blanco. Para tenerlo deberás ser socio de a alguna de las asociaciones que pertenecen a la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), como la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), cuya presidenta, Carmen del Riego, es quien ha anunciado las negociaciones que mantienen con el Ministerio del Interior para que la nueva Ley de Seguridad Ciudadana contemple este distintivo profesional que permita ejercer la profesión sin limitaciones. Al parecer, España es el único país de la UE que no tiene regulado este aspecto de la cobertura informativa de acontecimientos que tengan incidencia en el orden público. Aquí, información sucinta sobre el tema. La APM negocia con el Ministerio del Interior… Eleconomista.es.
Si nos lo regalarán o habrá que comprarlo, no se ha especificado, al menos que nos conste. Si será intransferible o podremos dejárselo a alguien que no esté asociado o incluso a un vecino que se va a protestar contra el ERE anunciado por su empresa contra los recortes en Sanidad, queda por ver. Dicen que serán chalecos homologados, ¿y cómo los van a homologar? Aquí nos las pintamos para fabricarnos unos chalequitos monísimos que den perfectamente el pego. Y a saber si no saldrá cualquier asociación provincial o autonómica a desmarcarse con que los suyos van a ser amarillos, entonces saldrá otra con el verde pistacho, el naranjita por aquí y el magenta por allá. Y luego explícaselo a la Policía, cuando se encuentre con la serpiente multicolor. “Es usted periodista riojano o de Cuenca?”. Falta saber, por otro lado, qué va a pedir el Ministerio a cambio en la negociación: ¿una leyenda en el pecho que indique el medio para el que trabajan? ¿Un chip que permita acceder a los trabajos publicados por el profesional en los últimos cinco años? “Ven aquí chaval, quién eres, quién te paga y qué escribes o qué fotografías, a ver si te suelto el porrazo o no”.
Y otras cosa, ¿los periodistas en paro tendrán derecho a la prenda identificativa? No lo sé, pero lo seguro es que tienes que estar asociado –que no tiene que ver exactamente con estar colegiado, como sucede en otras profesiones, y mucho menos con estar trabajando. Es decir, si no pagas cuota, no hay chaleco. ¿Habrá más periodistas asociados que periodistas trabajando? Porque según la propia FAPE, desde noviembre de 2008 se ha despedido a 11.145 periodistas y han cerrado 100 medios de comunicación (información de PRnoticias). Aquí la fatídica lista completa, que parece un interminable parte de guerra. Pero es evidente que hay muchos más. Porque hay muchos medios que no contempla la FAPE, pequeñas radios y televisiones locales, publicaciones sectoriales de muy distinta índole, una amalgama de publicaciones y portales online… además de los ERES aprobados pero aún no ejecutados. Así que no sabemos realmente ni cuántos son. Por no hablar de las condiciones en los que quedan los que por ahora mantienen su puesto de trabajo. Y dando gracias por quedarse como están.
Pero tenemos chaleco, que es lo verdaderamente importante. Podremos navegar por los tumultos sin correr riesgos, evitar que nos confundan con los anti-sistema y que todos sepan perfectamente quién somos. Eso sí, cuando entremos en los bares o en cualquier local público con el peto blanco, nos señalarán. “Mira son periodistas, pobres”. No trabajan o no cobran o no tienen para un vino; no les dejan preguntar en las ruedas de prensa, les dictan lo que tienen que escribir, les suspenden de empleo y sueldo, o les echan directamente, si se queja la autoridad o el ilustre anunciante; les rebajan el sueldo, les escatiman la paga extra o les incluyen en un ERE porque hay que seguir sufragando los sueldos de 50 directivos –esos llevarán peto azul-, y la empresa ya no puede soportar ese dispendio, no se puede seguir viviendo por encima de según qué posibilidades. Viven sometidos y apaleados, pero irán ellos tan contentos con su chaleco blanco. Y tan agradecidos a todas esas entidades que tanto les representan y les defienden. “¿Dónde vas sin calcetines y con los pantalones hechos girones?”. “¿Y tú, dónde vas sin chaleco?”.