Con tal de justificar a Mourinho y preservar su inmaculada infalibilidad, la ya menguante legión de seguidores, defensores a ultranza y forofos del entrenador portugués ha venido culpando a todo tipo de empedrados cuando las cosas no salían como esperaban, fundamentalmente a los arbitrajes. Cuando se ganó la Copa del Rey de 2011 se apresuraron a sentenciar que esa era la Madre de todas las Copas, cuando se consiguió la Liga de 2012, que era la mejor liga de la historia (?) y las otras 31 que atesora el club parecían no haber existido nunca. Ahora que el Real Madrid vuelve a mirar de lejos al Barça y la carencia de fútbol de este equipo se hace evidente, cuando la temporada empieza a recordar demasiado a la segunda de Schuster y ya huele a fin de ciclo, aquellos mismos señalan ahora a la prensa como la pérfida causante de la presumible caída de don José.
Lo primero, los periodistas serán lo que sean, unos más otros menos, respirarán por un lado o por otro, pero por lo general no derriban entrenadores ni gobiernos. Lo cuentan y pueden hacer mucha sangre de ello. Pero no provocan la caída, ya digo, salvo contadísimas excepciones en la historia. Y segundo, si somos honestos, José Mourinho no puede quejarse de haber recibido mal trato por la prensa de Madrid en los ya dos años y medio –aunque parezcan diez- que lleva en el banquillo blanco. Si la relación se ha ido degradando en los últimos meses, ha sido fundamentalmente porque la ha degradado él.
Mou fue recibido en Madrid como un entrenador ganador y garante de éxitos pero, sobre todo, como un maestro de la Comunicación, el “puto amo” de las salas de prensa –como luego diría de él Guardiola-, que jugaba los partidos durante toda la semana y sabía hábilmente crear el clima propicio para desestabilizar al rival y generar adhesión hacia su causa. Y nada de eso. Lo que se ha demostrado es que es un botarate que se mete en todos los charcos, larga y dispara sin estrategia alguna, entra a todos los trapos y al final termina dejando una imagen lamentable de él pero, sobre todo, de la entidad a la que representa. Como muy bien dijo anoche Alfredo Relaño, director de As: “un trasto”.
No sé como lo haría con los periodistas ingleses o italianos, pero con los españoles se ha estrellado una y otra vez. Y estos encantados de la vida, nada mejor para sus páginas y espacios televisivos y radiofónicos que tener tema de qué hablar, de poder analizar y hasta hacer comentarios de texto –como los que hacíamos en el colegio- de todas sus declaraciones. Podríamos citar innumerables ejemplos pero basten dos recientes: cuando le preguntan si jugará Benzema después de lesionarse en Vigo, y dice que normalmente alguien a quien sacan en camilla no está a tope para el partido siguiente (en alusión ya saben a quién) o cuando le preguntan por su futuro y espeta que lo que no va a hacer es tomarse un año de vacaciones (también saben por quién va). Y en Barcelona felices, qué más satisfactorio que saber que tu máximo rival se acuerda continua y pertinazmente de ti.
Básicamente, es muy difícil que un entrenador mantenga una buena relación con la prensa cuando:
– No celebra un sólo entrenamiento a puerta abierta.
– No deja a los informadores viajar en el mismo avión o autobús que el equipo.
– En las ruedas de prensa no permite hacer preguntas a determinados profesionales.
– Veta a periodistas y restringe preguntas sobre determinados temas.
– No comparecen ante los medios los jugadores, excepto en Champions porque tiene la obligación.
– Cuando no le apetece hablar, pone a Karanka para que le haga de guiñol.
– Llegó a decir a los periodistas que él sólo hablaría con los directores de sus medios, ¿se acuerdan?
– Presiona a los redactores para que le digan quién son los chivatos del vestuario –esto es, para que revelen sus fuentes.
– Cuando no le gusta la pregunta, aún siendo pertinente, responde con exabruptos y mala educación.
Me dirán que todos estos aspectos son en realidad cuestión de la dirección de Comunicación del Real Madrid. Pues sí, pero es que insólitamente a este entrenador se le ha permitido dirigir también la política comunicativa del club, y así le va. Y que no se engañe nadie, los periodistas que hoy acuden a Valdebebas y al Bernabéu son esencialmente los mismos que cuando Capello, Schuster, Pellegrini… y sí, cuando Del Bosque también. Y las preguntas eran y son las mismas.
Aún con ese comportamiento –con la prensa, insisto, no estamos hablando ahora del que manifiesta públicamente con sus jugadores, con los rivales, con otros entrenadores…-, Mourinho tuvo muchos defensores en los medios madrileños. Lo que pasa es que los apoyos cambian, y esa ya es otra historia. Desde su nuevo advenimiento a la presidencia, Florentino Pérez se dotó de un órgano comunicacional, ni más ni menos que Unidad Editorial, la empresa editora de los diarios El Mundo y Marca. Ambos se constituyeron en la voz oficial del florentinismo y desde su páginas se ensalzó y enalteció al técnico luso, se cantaron sus hazañas como si fueran las del Mío Cid y se obviaron o minimizaron sus miserias. Se entiende entonces que los medios de la competencia –principalmente AS y El País, del grupo Prisa– se posicionaran a la contra, al principio tímidamente, luego ya sin miramientos.
Sucede que desde comienzos de esta temporada, las relaciones entre el presidente y su “mejor entrenador del mundo” ya no fluyen ni van tan bien engrasadas. Y el poder mediático es del primero, no del segundo. Entonces los nuevos redactores de El Mundo a cargo de la actualidad madridista –los dos que escribían el año pasado pasaron a nómina de la Casa Blanca– ya cuentan “cositas” del vestuario, y el Marca de pronto te saca un día en portada a Löw y Ancelotti. En efecto, Mr Special One se ha quedado sin su principal apoyo, pero quien le ha abandonado no ha sido la prensa, sino su único y directo jefe.
El sábado, en el acto de imposición de insignias a los socios veteranos, se esperaba un gesto de apoyo por parte de Florentino. Y éste fue testimonial, frío y bien calculado, como cuando “la familia” te dice que te aprecia y te respeta mientras están organizando tu funeral. En la mezquina acogida de Mourinho al mensaje presidencial –y la trifulca que desató con el redactor de Marca- se notó que lo había captado perfectamente. Después el equipo transmite en el campo el mal ambiente imperante, hasta el Español le empata en casa, y si se pierde con el Málaga de Pellegrini esperan unas navidades bien calentitas, nada de turrón blando. Y Mou se justificará diciendo que es que algunos estaban más pendientes del Partido de la Ilusión, ya lo verán y ya sabrán por quién irá esta vez.
Mourinho empieza a vivir días de miseria en el Real Madrid, pero no se engañen. La fortuna la ha dilapidado él. No le echen la culpa a nadie más.
PIE DE FOTO: El Atletismo español descansa en paz. Nuestro atletismo lleva años bajo mínimos, la última medalla importante que se ha ganado ha sido la de bronce en Peso de Manolo Martínez… en Atenas 2004. Pero su gente ha decidido seguir igual. José María Odriozola ha renovado mandato al frente una de las federaciones más rancias y caducas de nuestro deporte, donde organización, políticas y resultados deportivos marchan en franco retroceso. 27 años de presidente habrá cumplido en 2017, y para entonces dice que ya no se va a presentar. O en fin, ya veremos…
Vaya monólogo madridista en que se está convirtiendo esta sección…. yo no se por qué le dedicais tanto tiempo a un club tan patético como el Real Madrid….. ya con lo de MOU en el centro del campo retando a la afición os teníais que quitar de esa institución venida a menos…..
Fuera del Real Madrid hay vida…. por ejemplo un magnífico Barsa-Atletico de Madrid donde el Atlético le puso ganas y juego durante media hora (lo que no hace nunca con el Madrid) y se acabó después…. o lo remataron más bien….. LO DEL BARSA ES ESPECTACULAR Y PARA QUITARSE EL SOMBRERO…..
Lo de Odriozola con 73 años y sigue el tío es de Juzgado de Guardia…. Y lo del Mundialito pues fijaros las ganas que tenían los dos de ganar y la alegría del campeón…. y cuando lo gana el Barsa aquí lo venden como una mierda de competición… pais…
Ciertamente había que hablar del partido de la jornada, lo que pasa es que, igual que hace quince días, no hubo noticia. Magnífico fue el Barça, ya que el Atleti jugó y tuvo presencia durante 30 minutos -frente al Madrid fueron solo 15- y otra vez después del gol, no sé bien si del maravilloso de Falcao o del tremendo de Adriano- pues se pinchó como un globo. La segunda parte resultó un paseo militar, eso sí que fue un monólogo, y la Liga está sentenciada, más que ya por la diferencia de puntos, por la tendencia que muestran uno y los otros. Con todo, a los atléticos que pude ver anoche les encontré bastante satisfechos por cómo se había desarrollado la jornada.
SI GANA EL BARSA Y PIERDE EL MADRID ESTAMOS SIEMPRE SATISFECHOS….. PERO TE ASEGURO QUE AYER PREFERÍAMOS QUE GANARA EL ATLETICO….. total el Madrid está ya acabado y ha cavado su propia tumba muy profunda con MOU y su troup portuguesa…. Cuando se valla va a dejar eso como un erial…..
cuando se vaya……. cada vez escribo peor
Esto cada vez se parece más a Marca TV. Madrid, Madrid, y Madrid, como si el resto de equipos fuéramos de Checoslovaquia. Ayer dan el Betis, ese equipo al lado de Katmandú contra el Celta, de un poco más al norte del Tibet, y cuando termina el partido pues vámonos a analizar lo que dijo el sinvergúenza ese que se ha quedado con todo el madridismo. Al partido que le den.
Pues lo mismo digo. Que le den también a esto.
Hace tiempo se me mosquearon porque respondí con pocas palabras a un mensaje. Todavía estoy esperando algún comentario a los post de más abajo. Parece que cuando no interesa pues no se responde.
Corto y cierro.
P-D.: Y a ver si se queda Mou para los restos. Porque no sé que vamos a hacer con tanto gilipollas suelto. Como me acuerdo ahora de uno que salía por aquí al principio idolatrando a este tontolaba. Jajajajajajaj, me meo toa. Anda hijo sal y deleítanos, aunque a lo mejor no lo leo, porque como he dicho antes dejo de leer al filial de marca tv.
Querido Oñate
Nos gustaría acertar siempre, pero lamentablemente no tengo esa potestad. Los lunes por la mañana, y a veces me tiro toda la tarde del domingo pensándolo, elijo un tema deportivo que comentar, a veces dos, o más, según tenga tiempo y, sobre todo, según tenga argumentos, ideas, en fin, algo interesante que aportar, o al menos que yo lo crea tal. Y no siempre es fácil, te lo aseguro. Si este lunes hago la crónica del Barça-Atleti o del Madrid-Español o de la final de la Intercontinental, pues seguramente todo el mundo ya lo ha visto y ha escuchado en las radios o leído en la prensa y en Internet. Otras veces sí lo hago, cuando creo que he visto digno de destacar que otros no han hecho. Ah, y del Celta-Betis ni eso, porque todavía no había jugado a la hora de escribir mi post, no tengo culpa de que pongan partidos los lunes y además casi siempre de los mismos equipos. Y claro, tampoco tengo culpa de lo que haga Marca TV, cuyos programas por cierto no veo.
En esta ocasión, con lo de Mourinho y sus relaciones con la prensa, creí poder ofrecer un punto de vista particular y distinto -porque es mío- sobre un tema que, sí, reconozco, ya aburre por recurrente e intensivo. Pero me toca a mí acertar o equivocarme cada día, y a los demás expresar lo que les parezca.
Por otro lado, no sé si haces alusión a un tema que corrió fuera de este blog hace unos días, pero si es así, ya te dije claramente que no, y te lo vuelvo a decir. En cuanto a los comentarios que dejáis, pues lo mismo que antes, respondo cuando creo que tengo algo que decir, puntualizar o aportar. Si no voy a decir nada nuevo, prefiero que quede la opinión expuesta y expresada libremente por cada uno. Y si alguien tiene algo que añadir, responder o criticar, que lo haga.
Por último, yo no estoy en disposición de exigir, demandar, pedir ni suplicar a nadie que lea este blog. Pero agradezco entusiastamente a todos los que habéis leído y comentado durante estos años, y desde luego a ti también. Si decides no volver, pues lo sentiré pero no te puedo decir nada, y simplemente te seguiré agradecido por lo andado, te lo digo de verdad. Un abrazo,