Quedándonos ya pocos Lunes de Retranca, se me puede quemar esta página si no hago referencia, días después ya de consumarse, al triunfo del Real Madrid en la Liga 2011-12. Ya sé que hay muchos más temas candentes, y ahora lo que hierve por ejemplo es el descenso, pero vamos a ir por partes, sucintos pero con buena letra, o la mejor posible. Para empezar, desmontemos o sentemos la cabeza sobre algunos dichos, tópicos y lindezas que se vienen vertiendo estos días:
Un justo campeón. Por propia definición de lo que es el torneo de la regularidad, el que gana siempre es el mejor, el que más puntos ha reunido en 38 partidos. En el caso concreto de esta, hablamos de una liga en la que la distancia entre los dos grandes y los demás es sideral. Por lo tanto, y como sucedió en las anteriores, el título lo gana, de los dos, el que menos falla, aparte de los enfrentamientos directos entre ambos. Aparte de que en general rayó un punto por debajo de su excelso nivel, el FC Barcelona se dejó más puntos de lo que es normal en la primera vuelta, y si lo miramos, esa es la diferencia que la tabla ha terminado reflejando al final. A ver, el que mejor lo explicó fue Marcelo Bielsa: no siempre gana el mejor, pero sin entrar a dilucidar quién lo es, el Real Madrid ha sido el que más lo ha merecido esta vez. Y añado: porque ha salido desde el principio a ganar todos los partidos, cosa que no hizo el año pasado ni ha hecho en Europa cuando ha tenido rivales de entidad
La Liga de Mourinho. Para muchos así es y no admite réplica. Curiosamente, es la liga número 18 que veo al Madrid ganar y nunca he escuchado que fueran la de Molowny, que ganó tres, las mimas que Beenhakker, o de Del Bosque (2), de Miljanic (2)…. Sí, curiosamente, se ha dicho, aunque no tanto como esta vez, cuando las ganó Capello. Algo deben tener en común los dos. Cierto que el Real Madrid ha conseguido un equipo realmente fuerte y ganador en la competición nacional –en la otra está aún por demostrar, siento decirlo. Pero para llegar hasta donde han llegado, ha habido una serie de jugadores clave que están en la mente de todos: Casillas, Xabi Alonso, Sergio Ramos, Cristiano, Benzema… ¿han llegado en estos últimos dos años?
¿Cambio de ciclo? En absoluto, lo único que se ha producido este año es una interrupción de una tendencia. Lo que suceda de aquí en adelante está por ver, y cada temporada es distinta. ¿Y que será del Barça después de Pep Guardiola? Nadie lo sabe, pero si a mí me preguntan qué es lo que quiero para mi equipo en la misma situación, no tendría duda en que apostaría por la solución que han tomado. Alguien de la casa que continúe la labor. Eso sí, si luego vienen mal dadas, los gerifaltes azulgranas no se van a cortar con Tito Vlianova como harían con Pep.
La liga de los récords. O la más maravillosa jamás contada, que proclaman muchos, empezando por la prensa imperialista. Miren, en una estructura de liga como la que tenemos, difícil es que no se batan. De goles, de puntos, de goleadores… y nada de extrañar si el año que viene caen otra vez. No quiero restar méritos a los de 50 de Messi y a los 45 de Cristiano, ambos registros impresionantes. Pero si nos referimos sólo a goleadores, no es lo de Gerd Müller, por mucho que nos empeñemos. Eso sí, lo que me rechina es ver estos días a tanto madridista estresado con el asunto de los récords…
¿Merece la pena? Recuperar el título liguero le ha costado al Real Madrid mucho esfuerzo, muchas frustraciones, mucho desgaste anímico y de imagen… y perder amigos. No los que nunca lo serán, sino los que fueron y han dejado de serlo. Tratándose del que más títulos tiene en España, me pregunto si ha merecido la pena pagar todo ese precio por uno más. Porque de momento, lo que se ha conseguido es la liga número 32.
Y aparte ya del Real Madrid, ¿cuál ha sido la mejor noticia de la Liga? Cada uno tendrá la suya, para unos el Levante, para otros la llegada del Cholo Simeone, el gol de Beñat en el Pizjuán… Para mí, sin duda: el Atlhetic de Bilbao, y lo que espero de verdad es que no sea flor de una temporada. Mi consejo, que vendan a uno –solo-, y con el buen dinero que saquen, refuercen y apuntalen esa plantilla para que sea realmente competitiva. Ganaríamos mucho todos.
El domingo a las 20.00h tenemos la traca final de la Liga, con el drama del descenso, la lucha por los puestos europeos y, sobre todo, partidos simultáneos, algo inédito esta temporada, a excepción de la jornada del pasado sábado. Respecto a la lucha por la categoría, una reflexión: el Zaragoza lleva años de un proyecto deportivo impresentable, y se encomienda a Jiménez, que si lo salva durará cuatro partidos de la temporada próxima; el Granada cesa al entrenador que le subió y ficha a Abel Resino; del Sporting qué voy a decir que no sepamos; y el Villareal, modélico otros años, se pasa este dando tumbos y termina en manos de Lotina. Claro, no pueden bajar todos. El único de los implicados que ha aguantado al mismo entrenador es el Rayo, pero claro, es que hace mes y medio estaban a un paso de Europa, y tampoco estamos hablando de un club con una situación ejemplar, precisamente. Lo dicho, tres plazas a veces son pocas. ¿Y que si es sospechoso lo de la reacción del Zaragoza? Pues hasta que no se demuestre o no se tenga al menos algún indicio, no se puede largar por esa boca como hizo el otro día el presidente del Granada. Pero raro sí que es, vaya.
Hablando de descensos, y cambiando de deporte, este fin de semana hemos asistido a uno que no nos puede dejar indiferentes: el de Estudiantes en la Liga ACB. Para hacernos una idea, equivale a si el Athletic de Bilbao baja a segunda en fútbol. A estas situaciones no se llega por casualidad, por un mal año, y la situación económica e institucional de los del Magariños venía anunciando algo así, han sobrevivido en el filo de la navaja varios años, y al final te cortas o te caes. Lo que pasa es que a lo mejor luego, después de todo, no terminan de bajar, si los que en teoría han de subir no pueden garantizar su solvencia. Que el deporte español está así, a todos los niveles y por donde busques. Y entonces, Estudiantes dirá qué bien, ancha es Castilla y a seguir más de lo mismo.
Eso sí, lo que no puede quedar en el tintero es la despedida de un grande del baloncesto español, Carlos Jiménez. No ha podido ser más triste su final, pero no por ello ha de olvidarse ni dejar de reconocer una carrera impecable, en el propio Estu, en Unicaja y sobre todo en la selección, hombre clave en el Mundial de 2006, nuestra gran cima hasta ahora, y donde aún se le echa de menos desde que la dejó.
Enhorabuena. Es así, uno pierde puntos y el otro no, pues no ganas la liga. De todas maneras o esto le dan un giro o se cargan el fútbol, sí o sí, como diría el chorizo de Del Nido.
No puede quedar un tercero como el Valencia a tropecientos puntos del segundo. Y el nivel a partir de ese puesto ya no es bajo, es lo más que se puede despachar, es ya asqueroso vamos.
Para mi lo mejor de esta liga, aparte de lo del Athletic, pues la verdad nada de nada, ni el gol de Beñat. Cada vez me está aburriendo más, y los de la prensa ésta de la caverna, que todavía estarán en el quinto orgasmo, pues van a ser los que den la puntilla definitiva. No perderse que hoy dicen que los 50 goles de Messi no valen nada si no eres campeón, es asqueroso vamos.
En lo del descenso, pues sí suena muy mal lo del Zaragoza, y sobre todo ayer. Ojo, por una vez digo que el Madrid no tiene culpa de nada para lo que pasó a continuación, pero vamos a ver inútiles del comité de árbitros, que haceis enviando a pitar un partido como éste a uno de Zaragoza, con la familia toda ella socia de ese equipo. Por Dios, estamos gilipollas o qué, pues claro que tienen todo el derecho a quejarse, yo lo haría si fuera mi equipo pero no hasta ese punto. Llevo mucho tiempo diciendo que Dani Benítez, otro discípulo aventajado de Cristiano, es tonto del culo y lo confirmó el otro día. Criaturita.
Y lo del Estudantes, pues más de lo mismo.