Paul McCartney, We Got Married. YouTube
En 1989 escribió Paul McCartney esta canción sobre las parejas jóvenes que se casan superando todas las dificultades –piso, trabajo, poco dinero y nulas expectativas…- propias de esos años en Inglaterra, en pleno efecto de las políticas “sociales” de Margaret Thatcher, con las que el autor fue muy crítico. Por otro lado, es uno de los mejores temas del álbum Flowers in the Dirt y dio muy buen juego en directo, a lo largo del ya mítico tour Get Back con el que Paul volvió a los escenarios, recuperó su mejor repertorio y, bueno, casi no ha parado hasta nuestros días. Un tema de delicado inicio melódico en el que irrumpe como un trueno la guitarra de David Gilmour –aunque él no sale en el video clip–, gran amigo y colaborador del ex beatle en puntuales y grandes momentos.
Aunque sus circunstancias son bien distintas a las que describe la canción, viene hoy a propósito, con una semana de retraso, de su reciente tercera boda. Linda le pidió, antes de morir, que no se quedara solo, que buscara alguien con quien compartir su vida y su música, que vienen a ser lo mismo. Y a fe que Paul hizo caso, no tardó un año en empezar a salir con Heather, que sería su segunda mujer y que casi le saca los ojos. Se tuvo que conformar con un buen pellizco, pero si los abogados del músico no lo impiden, le hubiera dejado en pañales. Como efectivamente no sabe vivir solo, apenas roto ese segundo matrimonio se le empezó a ver con Nancy Shevell, mírala tan guapa a sus 51, hija de un magnate –”así nos evitamos sustos”, pensaría- con la que se casó el pasado domingo. Como tampoco sabe parar, justo al día siguiente anunció Paul su nueva gira por Europa, continuación de la que realizó por Estados Unidos este verano, bajo el título On The Run Tour, y que sucede al Up and Coming Tour, que se desarrolló durante 2010 y tuvo una prolongación en mayo de este año. Por ahora no está incluida ninguna ciudad española en la agenda de conciertos, así que tocará viajar si queremos volver a verle en vivo. Así vive el Sir a sus 69, encadenando giras, beneficencias, boda y un disco de danza clásica, a falta de noticias sobre nuevos trabajos en lo suyo, que siempre fue el rock pese a todo, y que empiezan a echarse de menos. Sea como fuere, desde aquí le deseamos a Macca mucha felicidad, suerte e inspiración, que le vaya casi tan bien como en su primer matrimonio, y desde luego mucho mejor que en el segundo.
Byenrique 