He aquí dos Nortes, o tal vez dos versiones del mismo Norte. O que los vemos de forma diferente, desde distinta perspectiva o con ánimos disociados y hasta desencontrados en el tiempo y en el espacio. Porque ya me dirán qué tienen que ver estos dos paisajes. Bueno, si nos ponemos, a lo mejor encontramos puntos en común. Y ya aviso que los hay. El caso es que estos dos Nortes –sean o no el mismo- han vivido juntos mucho tiempo y por desgracia, contra su voluntad, han tenido que separarse un tiempo que, lamentablemente, se ha hecho muy largo. Pero me dicen que ahora vuelven. De una escena a otra hay varios años de diferencia, y sin embargo me consta que cuando ambas ya existía y funcionaba la relación. Fructífera, plena, real. Sobre el mismo fondo porque en el fondo son como lo mismo. Eran uno para el otro, los Nortes que se aproximan, se juntan y se tocan. Que se necesitan y no serían lo mismo viviendo en dos mundos separados, como los corazones de aquella canción. No perdamos nunca estos Nortes, ni uno ni el otro ni el de siempre. No consintamos vivir más sin ellos. Ahora parece que los vamos a recuperar.
La solución, en dos días. Me lo han prometido, pues yo también.
Byenrique 
Que pasa que te pasastes con el vaso ese día y lo veías todo borroso, no?.
Una de las fotos, la del edificio, es Edimburgo. La otra, aparte que no se ve nada de nada, pues eso, que será lo que Enrique quiera que sea, porque vaya tela.