Empanada en Madrid

Que sí, que hoy también hablo de fútbol, no se piensen que me escondo en el balonmano y en el tenis para no referirme a estos desastres. Pues vaya fin de semanita y vaya mesecito de enero. Para todos los equipos de Madrid. Ya viene siendo tradición que el Atleti, después de Navidades, viene con un polvorón de cuidado y arrasa con todo, principalmente con sus entrenadores. Este año, el pasado, el otro, Aguirre, Abel, Quique Flores… Ahora el Getafe parece que le ha tomado gusto a la movida y ha completado un mes “glorioso”, tirando la Copa y sus posibilidades europeas en Liga, Michel mirándole las barbas… a su presidente. El Rayo ya lo hizo la temporada pasada y gracias a eso hoy Pepe Mel triunfa en el Betis –aunque también llevan dos jornadas de “caraja” tras su baño de masas copero. Pero lo del Madrid… bueno, lo del Madrid no es resaca navideña, más bien le viene del Día de Acción de Gracias, a lo mejor por aquello de haberse concentrado en Los Ángeles el verano pasado. Sí, allá por el 29-N a los de Mourinho, y a Mourinho el primero, se les bajó todo el pavo y empezaron a pinchárseles todos los globos. Desde aquel día todo ha ido a menos en este equipo: las fuerzas, la puntería, la clarividencia… hasta la defensa, se suponía el gran argumento del portugués. Pero sobre todo la coherencia es lo que pierde enteros por momentos. Y la plantilla, consumida, reducida al mínimo en recursos y en efectivos. Pero es justo después del numerito con lo del “9”, una vez que Mou ya se ha salido con la suya y tiene a su delantero en el banquillo –que para eso lo quería, no para otra cosa, ya lo verán- cuando el Madrid se encuentra el partido más plácido que ha tenido en Pamplona en años. Y lo pierde. Hasta el 1-0 no parecía ni el Osasuna, todo estaba bajo control, pobre control, eso sí, porque que no había quien pusiera algo de sentido y criterio en la elección de las jugadas. Sin Xabi en el campo este equipo juega con visera y orejeras. Cristiano, en cuanto lleva tres partidos sin mojar, se ofusca y se vuelve insoportablemente egoísta. “Si no nos llegan”, presumirían los mourinhistas acérrimos, pues mira por donde nos llegan una vez y ya está liada. Y la respuesta inmediata, tres cambios que se antojan inmeditados, hechos al tun tun y que no mejoraron nada el juego, el criterio ni la llegada. ¿Quién permite que Kaká le “robe” los balones a Xabi y los tire a la basura una vez y la siguiente también? Y entonces ya sí fue Osasuna, vaya si lo fue. Aranda dejándole en ridículo a Khedira… qué dolor. Pues en esas estamos, mucho proyecto ambicioso, mucho “impulso” del presidente, mucho genio anti-barça, mucho poder, mucho numerito… y el castillo se desmourona por momentos. En Liga estamos peor que hace un año. Para los que querían resultados.

P.D. Pero yo sigo opinando, soy así de cabezota, que en esta liga se juega más que bien al fútbol, y aparte todo lo que ya sabemos de este Barça, dejo como muestra el Español-Villarreal de anoche. Y el gol de Rossi, rotundo y espectacular. Español-Villarreal, vídeo en Elmundo.es