Hacerte publicidad podría…

Nunca fue de buen estilo nombrar a la competencia cuando haces comunicación de tu producto, ya sea publicitaria o PR. Firmas de referencia en sus mercados, generalmente líderes, procuran –o procuraban- no hacerlo. Ante la pregunta sobre tu competidor, bridging al canto, destacar tus virtudes y obviar al rival. Incluso, elegantemente, se podría decir: “hay grandes firmas en el mercado, el usuario es el gran beneficiario de ello. Nosotros ofrecemos tal y tal y tal…”. Viene esto a cuento de que acaba de ser retirado, a petición de FACUA, el anuncio de Microsoft sobre su navegador Internet Explorer 8.0. Ese en el que bajo el lema “Ayudarte podría” el maestro Yoda recomendaba no usar otro navegador y lo nombraba –Firefox, Chrome, Safari…– alegando que con ellos “sin la fuerza navegando estás”. Hace poco hemos tenido el rifirrafe entre Don Simón y Granini por un quítame allá esos naranjos. Si mal no recuerdo, fue también Don Simón la que hace unos años emprendió una campaña alusiva contra Minute Maid. La petición y posterior retirada del anuncio de Microsoft ha sido por presunta publicidad desleal, en concreto por contener “información falsa o información que, aun siendo veraz, por su contenido o presentación induzca o pueda inducir a error a los destinatarios, siendo susceptible de alterar su comportamiento económico", según reza la Ley, que por cierto es de 1991. Bien, esto será o no será, no voy a entrar porque adonde quiero ir es al buen estilo, al mensaje positivo y creíble. Nombrar a la competencia no estará prohibido pero para mí siempre ha restado credibilidad. Microsoft no solía hacerlo en su discurso corporativo, aunque luego, tratándose de una empresa con tantísimos portavoces -autorizados o no o quién sabe-, cualquiera se podía ir de madre. Pero por lo general, los portavoces más cualificados optaban por no aludir al enemigo. Se les recomendaba no hacerlo y cumplían. Al contrario, era su competencia la que continuamente usaba su nombre hasta borrarlo. O mejor dicho, todo lo contrario que borrarlo porque acababa surtiendo efecto inverso. Recuerdo especialmente a Sun Microsystems y a su fundador, Scott McNeally. No había titular entrecomillado de una aparición suya en prensa que no llevara impresa alguna de las palabras Microsoft, Windows o Bill Gates. Yo decía en broma –pero también un poco en serio- que el bueno de Scott estaba terminando por ser el mejor publicista de Microsoft. Pero parece que los tiempos cambian o, mejor dicho, cambian los escenarios. Es como si las pérdidas de negocio se tradujeran en pérdidas de formas que indefectiblemente conllevan nuevas y mayores pérdidas de negocio. Un círculo en el que por lo que se ve es fácil caer. No ha mucho que con Internet Explorer, Microsoft gozaba de una cuota del mercado de los navegadores en torno al 90% -y soy, con perdón, de los que no comparto las acusaciones de monopolio que se vertieron sobre la compañía. La prueba es que esa situación ha cambiado. Hace un año, esa cuota ya era del 67%, incluyendo todas sus versiones. Ahora es del 59% según el último informe de Net Applications Muy Computer 2 junio, Informe Net Applications sobre navegadores, fechado el 1 de junio. ¿Ha cambiado el discurso porque ha bajado la cuota? ¿Se ha puesto alguien nervioso en Redmond o en La Finca? ¿De verdad cree Microsoft que va a recuperar terreno utilizando la táctica que tan mal le fue a sus competidores? A lo mejor es un caso aislado, me gustaría saber que Microsoft sigue manteniendo su buena política en el grueso de su comunicación. Por lo tanto, reservaré ese beneficio de duda. Pero sigo diciendo, y seré muy pesado, que ese tipo de mensajes ayudar podrían, sí… a con la competencia irse. Con razón no le veo nada contento yo a este Yoda.