Mou…cho mejor sí, pero ni Pepito ni don José

El Madrid lleva dos partidos convincentes. Más el del sábado en Málaga, por la mayor exigencia del partido y del rival. No va a querer esto decir que lo que han sido críticas y sobre todo mucho dolor por el juego que estaba mostrando el equipo de Mourinho, ahora de súbito se transforme en encendidos elogios, de Pepito no va a pasar ahora don José. Habrá que ir partido a partido, seguirlo y ver cómo evoluciona esto. Claro, al final el balance lo hace el final de la temporada, lo que se gane, a quién se gane y lo que se vea, que tanto en un Real Madrid como en un Barça es una asignatura a tener en cuenta, aunque se saque sobresaliente en la de títulos conseguidos. La cita de mañana contra el Milan se presenta interesante y buen indicador del estado real de construcción de la Obra Mourinho, pero desde luego uno tiene ahora muchas más ganas de ver ese partido que las que tenía hace dos semanas. Sí, ya sabemos que los rossoneros no asustan como antaño, son un equipo viejuno y lleno de piezas de museo. Pero esos retratos de Dorian Grey vienen al Bernabéu a reivindicarse, es un escenario que les motiva, y si no se le mete el ritmo debido al partido, nos terminan chuleando como hicieron el año pasado. Especial morbo promete la vuelta de Robinho después de cómo se marchó, que tiene ironía que a este le pongamos ya en la estantería de las momias, lo mismo que a Ibrahimovic, otro que viene con el trabuco cargado. En fin, primer partido presumiblemente grande de la temporada. Si Cristiano firma mañana un partido como el de La Rosaleda, tendremos mucho ganado. Porque éste es el Cristiano que debería ser siempre, velocidad y remate son sus principales argumentos, los que debe explotar. Cuando se mueve, busca el espacio y entra en carrera lanzada, es casi imparable. Cuando pide el balón al pie y pretende iniciar jugada desde posiciones estáticas, es inofensivo porque no se va de nadie. Parado se ofusca, en movimiento parece que se le aclaran las ideas. El salto de calidad para él –y para el Madrid- será reproducir sus dos últimas actuaciones en partidos grandes. Se le espera para entonces, y entonces diremos si ha venido o no, si tendremos que darle caña otra vez o si por fin terminamos reconociendo que fue un gran fichaje, para eso mucho tendrá que hacer, aviso. Es que si él e Higuaín están por la labor de moverse y buscar los espacios, este Madrid tiene por fin gente que los ve, que crea fútbol, jugadores que sólo con que dispongan de un metro de distancia y puedan levantar la cabeza, sabes que van a elegir la jugada acertada, la que hace más daño. Claro, hablo fundamentalmente de Özil y Xabi, pero también merecen oportunidades gente como Canales, Pedro León… Bueno, lo dicho, me gustaría seguir hablando bien de este Madrid, pero lo que no voy a hacer, claro, es liarme la manta por dos buenos partidos. A ver…